Los Kohanim o Sacerdotes

Amados lectores, que la misericordia de Ha Kadosh Baruj Hu  – El santo bendito es- sea sobre ustedes y sus familias, esta porción semanal, que el Eterno nos permite estudiar llamada Emor, que bien se puede traducir como “Diles”, nos narra una serie de instrucciones del Eterno a los kohanim – sacerdotes -. Los kohanim eran los hombres que el Eterno asigno para realizar la avodá -servicio- en el Mishkán -tabernáculo- y posteriormente en el Beit Hamikdásh  -Santo templo-. Los kohamin tenían que pertenecer a la tribu de Levi, ninguna persona que perteneciera a otra tribu podía ser kohanim. El Elohim de Israel proporciona leyes y mandamientos para que el pueblo adquiera un estatus de santidad. Sin embargo, para los kohanim debían cumplir leyes de santidad que superaban a las que regían al resto de la nación.

Muchas de estas reglamentaciones son muy difíciles de entender, y sobre toda con una vista común, salen de toda lógica e incluso se pueden de calificar como rigoristas.

El primer mandamiento dado por el Eterno a los kohanim es de no tocar ningún cadáver de su pueblo, ni siquiera permanecer bajo el mismo techo con ellos, ni participar en su funeral, excepto por su esposa, su madre, su padre, su hijo, su hija, su hermano y su hermana virgen. Los kohamin son hombres muy especiales para el Eterno.

Enseñanza

Vaykrá -Levítico- 21: 6 Ellos deben ser sagrados para su Elohim. No deben profanar el nombre de su Elohim, pues ellos son los que presentan las ofrendas de fuego de Hashem, pan de su Elohim y por eso deben ser sagrados.

Los kohanim por ser los encargados de este servicio al Eterno, requieren de una santidad especial Para poder comprender un poco este mandamiento de no tocar a ningún cadáver el midrásh-tradición oral- cuenta la siguiente historia.

Cuando el cocinero jefe ingresaba al servicio del rey, se le advertía, “¡Eres responsable de la preparación de todas las comidas que se sirvan en la mesa real. El rey esta acostumbrado a la comida más refinada preparada  de la manera más estética. En caso de que alguna vez tocases un cadáver mientras realizas las compras en el mercado, su olor se impregnará. La esencia será perceptible en el palacio, y el paladar sensible del rey la detectará en la comida. Por lo tanto ¡ten cuidado de tener contacto alguna vez con un cadáver!”

De manera similar los Kohanim que eran los responsable de hacer y de llevar el pan y los korbanot ante el Eterno, deben de estar puros, no exclusivamente  por los aspectos físicos de los cadáveres, si no también los aspectos espirituales que con lleva un cadáver.

Con respecto al matrimonio la Torá dice: Vaykrá – Levítico- 21: 7 No deben casarse con una mujer inmoral o de una relación prohibida. Tampoco podrán casase con una divorciada, porque él es sagrado para su Elohim.

Nuestros sabios explican que la Torá prohíbe a un Kohén contraer matrimonio con mujeres inmorales por la siguiente razón: Los pensamientos de un hombre están influenciados por los de su esposa y en gran parte, se dirigen a ella. La pureza y santidad de un Kohén se hallan por encima de las del resto de la gente. Por lo tanto la Torá, quiere que contraiga matrimonio con una clase de mujer cuyo pasado sea inmaculado. El fin que la Torá persigue es el de asegurar que él no sea molestado en el desempeño de su santa tarea por una mujer cuyos conceptos están por debajo de los patrones de su esposo.

Un kohén no puede contraer matrimonio con una  guioret -una convertida-. Sólo puede contraer matrimonio con una joven que es judía de nacimiento.

Por otra parte, con respecto a los aspectos del físico de los Kohanim, para que ellos pudieran tener participación en los korbanot, la Torá indica.

Vaykrá -Levítico- 21:17 Transmítele a Aharón Dile: Cualquier descendiente tuyo, por todas la s generaciones, que tenga algún defecto, no deberá ofrendar el alimento de su Elohim.

Algunos defectos que  imposibilitaban a un Kohén para realizar los Korbanot son: Ceguera, sordera, nariz deformada, alguna fractura, cejas grandes, cataratas, testículos dañados, una parte del cuerpo más grande que la otra como por ejemplo las orejas, etc. Nuestros sabios enumeran ciento cuarenta defectos que incapacitan a un Kohén para llevar a cabo la avodá -servicio-.

El Zohar enseña que los Kohanim reflejan los anfitriones celestiales que son perfectos. La shejiná-presencia divina-, que es perfecta, habita únicamente en un lugar de perfección. Por consiguiente, tanto los Kohanim como los animales que se sacrifican y los mismos procedimientos de los korbanot tenían que ser perfectos. La Torá trata de evitar cualquier mínimo error por alguna deficiencia física. Los defectos específicos que invalidan a un sacerdote para llevar a cabo el servicio sacerdotal constituyen manifestaciones físicas de defectos  espirituales. Hashem es su infinita sabiduría, sabe exactamente cuales almas son dignas de ofrendar sacrificios y cuales no.

Un Kohén , al que no se la permitían ofrendar sacrificios debido a un defecto, se la asignaban diferentes tareas, como por ejemplo examinar la madera para el altar a fin de asegurase de que no tuviera gusanos.

Vaykrá -levítico- 21: 10 El sacerdote que haya sido designado sacerdote principal, sobre cuya cabeza haya sido vertido el aceite de la unción y que fuera consagrado para vestir las vestimentas, no debe dejarse el cabello largo, ni rasgar sus vestimentas.

Con respecto al sacerdote principal -kohén gadol- las leyes son mas estrictas, como por ejemplo, era mas restringido para elegir una esposa que un kohén común debido a su kedushá-santidad superior, además de cumplir con las reglamentaciones para un kohén común, tiene el deber de casarse con una mujer joven que nunca haya tenido relaciones con otro hombre -virgen-.

El kohén gadol no participa del funeral de alguien de parentesco cercano, como lo hace el resto de los kohanim. Aun si su padre o madre mueren, no puede asistir a sus funerales.

Todos los kohanim son sagrados, pero el kohén gadol es más sagrado, era elegido por el sanhedrín supremo de 71 miembros. Cuando ingresaba al servicio se le ungía con el aceite de la unción sagrado y vestía los ocho ornamentos del gran sacerdote.

Un Kohén debe reunir cinco requisitos para servir como kohén gadol.

1.-Sabiduría

El kohén gadol realizaba la avodá como representante de toda la nación. La característica que importaba, por sobre todas las cosas para esta tarea responsable, era su gran conocimiento de la Torá.

2.- Ser buen mozo

Era apropiado que el gran sacerdote fuera un buen mozo en honor a Hashem y al Beit Hamikdásh. Igualmente, cuando elegimos un objeto para hacer una mitzvá -mandamiento- es conveniente que elijamos el más bonito de todos.

3.-Fuerza Física

Era muy ventajoso para la avodá ser fuerte. Por citar un ejemplo, él tenía que realizar el arduo servicio de Yom Kippur aun en ayuno.

4.- Riqueza

El Kohén Gadol debía gozar de una posición económica superior a la del resto de los Kohanim.

5.- Edad

Era preferible que poseyera la dignidad y experiencia que se adquiere a una edad madura.

Nuestros sabios cuentan que si un posible candidato para ser kohén gadol no era buen mozo o fuerte,  cuando era ungido, se transformaba milagrosamente su apariencia exterior, haciendo que creciera en altura, belleza o fuerza.

Los grandes sacerdotes que sirvieron en el primer Beit Hamikdash eran sagrados y representaban al ideal supremo que ellos debían representar

Durante la existencia del segundo templo muchos grandes sacerdotes compraban su cargo con dinero. Durante los cuatrocientos veinte años del segundo templo, hubo más de 300 sumos sacerdotes. Debido a que ellos eran indignos, la mayoría murió durante el primer año de su servicio. Por otra parte solo dieciocho kohanim guedolim oficiaron en el primer templo durante un periodo de cuatrocientos diez años. Como ellos temían y respetaban a Elohim, Hashem les alargo la vida.

El ser kohén gadol es una posición de privilegio y de gran honor, por ser el hombre sobre la tierra más cercano al Eterno, el poder entrar al lugar kadosh hakedoshim se requería de una preparación extraordinaria y una santidad muy elevada.

Conclusion

Hebreos 9: 24 por que no entró Mashiaj en el templo hecho de manos, figura del verdadero, sino en el mismo cielo para presentarse ahora por nosotros en la presencia de Elohim.

Hebreos 7. 27 Por que tal Kohén Gadol nos convenía: Santo, inocente, limpio, apartado de los pecadores y hecho mas sublime que los cielos.

Nuestro Rabino Yehoshua HaMashiaj, en su papel de Mashiaj, no fue kohén gadol en la tierra, el fue kohén gadol del Templo celestial, para llegar a hacer esto tuvo que tener una perfección tal que le permitiera alcanzar una santidad digna de un  kohén, mantuvo su vida ligada a la Torá y ofreciendo su propio korbán-sacrificio llego a introducirse al kadosh hakedoshim celestial.

De ninguna manera se ha cancelado el servicio sacerdotal de la tierra.

Hebreos 8: 4  Así que, si estuviese sobre la tierra, ni aun sería sacerdote, habiendo aun los sacerdotes que ofrecen los presentes según la ley.

En la tierra, Yehoshua HaMashiaj no fue sacerdote, puesto que no es de la tribu de Levi. Aquí en la tierra están los sacerdotes que ofrecen los sacrificios según la Torá.

Para que Yehoshua HaMashiaj alcanzara el estatus de Sacerdote, fue mediante la orden del sacerdote del  Elohim Altísimo llamado Malki Tzedek -Melquisedec- el cual evidentemente no fue de la tribu de Levi, puesto que aun las tribus no existían, pero si una avodá sacerdotal, en este caso por parte del sacerdocio de Malki Tzedek, del cual habla la escritura.

Tehilim -salmos- 110: 4 El Eterno lo ha jurado y no se arrepentirá: “Tu eres un sacerdote para siempre” según la Orden de Malki Tzedek

Nos habla de un sacerdote para siempre, todos los sacerdotes de la tribu de Leví de la tierra han muerto, su sacerdocio no ha sido para siempre, por lo tanto este pasaje no se aplica para ellos. Este sacerdote que es según la orden de Malki Tzedek, es decir no de la tribu de Leví, como lo fue Yehoshua Ha Mashiaj, por lo tanto adquiere el sacerdocio por esta línea  y al ser de la orden de Malki Tzedek es sacerdote para siempre.

Hebreos 7: 14 Porque notorio es que el Señor nuestro nació de la tribu de Yehuda, sobre cuya tribu nada hablo Moshe tocante al sacerdocio. Y aun mas manifiesto es, si a semejanza de Malki Tzedek se levanta otro sacerdote, el cual no es hecho conforme a la ley hereditaria, pues se da testimonio de él. “Tu eres Sacerdote para siempre”

Amados tenemos un Kohén Gadol, que tiene un sacerdocio inmutable, Yehoshua HaMashiaj, el justo.

¡Shabat Shalom!

Que el zejut-mérito-del estudio de esta porción sea para hatzlajá y parnasá de Ariel Medina vemishpajá-y familia-,así como consuelo del Cielo hacia Yohaná Bat Sará

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